6 recomendaciones para afianzar la relación matrimonial

Cuando reconocemos que algo no anda bien y decidimos emprender el cambio, el curso de la historia conyugal y familiar será distinto. Comparto con usted seis recomendaciones que le permitirán afianzar el amor y el respeto en las relaciones.


Fernando Alexis Jiménez | @Conexión365


Hay dos palabras que a su vez encierran actitudes  que nos permiten afianzar la relación matrimonial y asegurar su permanencia, con ayuda de Dios. Me refiero al amor y al respeto.

El apóstol Pablo lo sintetizó así, en su carta a los creyentes de Éfeso en el primer siglo:

“Por eso les repito: cada hombre debe amar a su esposa como se ama a sí mismo, y la esposa debe respetar a su marido.”(Efesios 5:33| NTV)

Deja claro algo que la sicología pretende haber descubierto en nuestros tiempos: la importancia del amor y del respeto en la vida conyugal.

HOGARES CONVERTIDOS EN TRINCHERAS DE GUERRA  

Dios concibió el hogar como un espacio en el que los cónyuges, además de compartir en armonía, pudieran educar los hijos bajo sólidos principios y valores (Proverbios 22:6) No obstante, cuando la familia se convierte en una trinchera donde priman los enfrentamientos, el odio, las palabras de resentimiento y expresiones de hostilidad, los componentes de la pareja reciben profundas heridas emocionales y los niños, adolescentes y jóvenes llevan la peor parte.

Sabiamente el apóstol Pablo enfatiza en los componentes de una buena relación. La mujer valora las demostraciones de amor al tiempo que para el hombre, resulta significativa la demostración de respeto.

Pese a ello, encontramos hoy mujeres que tratan a sus maridos como quieren, con hechos y con palabras, mientras que los hombres son hoscos con sus esposas y no le expresan lo que sienten por ellas. En un ambiente así, no podemos esperar menos que problemas.

ASUMA CAMBIOS EN SU RELACIÓN  

Cuando reconocemos que algo no anda bien y decidimos emprender el cambio, el curso de la historia conyugal y familiar será distinto.

Comparto con usted 6 recomendaciones que le permitirán afianzar el amor y el respeto en las relaciones:

-> Sea cuidadoso al referirse a su cónyuge. Mida sus palabras (Proverbios 12.18)

-> Desarrolle tolerancia en la relación matrimonial y con los hijos (Colosenses 3:13)

-> Reconozca que nadie es perfecto y que debemos aceptar al otro tal como es. Si nos disgusta, el camino es orar a Dios para que lo cambie.

-> Trate con amabilidad a su esposo o esposa, aun cuando no siempre sea retribuido.

-> Si hay disgustos, ore a Dios para que sane cualquier herida que haya en su corazón. Le evitará, hacia futuro, explotar y causar heridas con sus palabras y sus acciones.

-> Permita que Dios les ayude a ser edificados en amor (1 Corintios 8:1 b). Si no sabe cómo hacerlo, pídale sabiduría al Señor en oración.

Puedo asegurarle que estas sugerencias le ayudarán a fortalecer su vida matrimonial, y de paso, crearán mejores condiciones para sus hijos.

EL CAMBIO COMIENZA POR USTED  

La vida matrimonial no cambiará a partir de la decisión de su cónyuge, puedo asegurárselo. A menos que él o ella tengan la suficiente humildad y grandeza de corazón para reconocer que han fallado.

Es allí cuando cabe aplicar el mejor consejo que tenemos a mano para que nuestra vida matrimonial se fortalezca. Lo enseñó Jesús a una multitud, y cobra particular vigencia hoy para la vida conyugal:

«Así pues, hagan ustedes con los demás como quieran que los demás hagan con ustedes; porque en eso se resumen la ley y los profetas.» (Mateo 7:12| Versión Dios haba hoy)

Si anhelo un cambio, yo mismo debo cambiar. Es un proceso que comienza con reconocer las faltas y, en segundo lugar, cuando pido la ayuda de Dios. Renuncio a mi orgullo para darle lugar a Él, permitiendo que tome control de mis pensamientos y acciones.

Hay otro consejo práctico, sencillo pero eficaz para mejorar su relación: elabore un listado con las cosas positivas de su cónyuge. Diariamente anote una sola. Comprobará al final del mes, que son más las virtudes de su esposo o esposa, que los errores. Ese simple ejercicio le ayudará a cambiar su perspectiva, y comenzará a valorar el matrimonio.

Permítame despedirme con una invitación. Ábrale las puertas de su corazón a Jesucristo. Deje que Él tome el control de sus pensamientos y acciones. Es el camino eficaz para imprimir transformación a su vida personal, espiritual y familiar. Es un viaje maravilloso que no se puede perder. Ábrale hoy las puertas de su corazón a Jesucristo.

© Fernando Alexis Jiménez | @Conexión365

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